Educación e interculturalidad en Chile

Las investigadoras del Programa Interdisciplinario de Estudios Migratorios (PRIEM) de la Universidad Alberto Hurtado, Carolina Stefoni, Fernanda Stang y Andrea Riedeman, han publicado el estudio “Educación e Interculturalidad en Chile: Un Marco para el Análisis” (2016), el que indaga en la inserción de los niños y niñas migrantes en el sistema escolar chileno, sosteniendo que la ausencia de una política pública que entregue lineamientos para la inclusión y la invisibilización de la discriminación que estos niños y niñas viven, impiden construir un proyecto educativo que se base en la interculturalidad.

Las migraciones son parte de una transformación global económica que ha dado como resultado la concentración de la riqueza y el incremento de la desigualdad y de la vulnerabilidad social. Ante el crecimiento de este fenómeno, han comenzado a proliferar una multitud de discursos sociales que tienden a asociar las migraciones con inseguridad en los barrios, falta de empleo para la mano de obra nacional y el incremento de la delincuencia y el narcotráfico. Sin embargo, lo cierto es que muchos de estos problemas son efecto de recortes en el gasto público y de los menores niveles de crecimiento económico, no de los extranjeros. Aún así, estos discursos son capaces de permear en la población, teniendo efectos por cierto en los niños y niñas migrantes, especialmente en el espacio de la escuela, lugar en que se generan diferentes prácticas que reproducen la discriminación. Ante esta situación, algunos colegios han comenzado iniciativas para abordar la diversidad social y cultural.

De esta forma, este estudio se ha centrado en el caso de una escuela pública de educación básica en Santiago para determinar las dificultades que se deben enfrentar cuando se intenta implementar un proyecto educativo intercultural. Además, como apoyo se utilizaron los resultados de una investigación realizada en el marco del Programa Servicio País de la Fundación Superación de la Pobreza (FUSUPO).

Las investigadoras han resumido el cuestionamiento principal que da pie al análisis de esta investigación en la pregunta, “¿cómo abordar procesos de enseñanza y aprendizaje en contextos de diversidad cultural desde la mirada intercultural?”. Esto, entendiendo que existen dos enfoques diferentes que permiten abordar la diversidad e integración: el multiculturalismo y el interculturalismo.

El multiculturalismo se entiende como al coexistencia armónica y horizontal, de forma aconflictiva y no jerárquica, de grupos o individuos que pertenecen a diferentes culturas. En ese sentido, el multiculturalismo parte del supuesto de que no existe conflictividad ni desigualdad en las relaciones entre las diferentes culturas, asumiendo una mirada estática de la cultura, pensándola como una unidad cerrada y estable.

El enfoque intercultural, por su parte, alude al proceso que se produce entre dos culturas distintas, buscando intervenir en los procesos de diversidad para orientarlos hacia espacios de comunicación que por sí solos no se generarían. La interculturalidad supone que se produzcan cambios en la cultura de origen a fin de incorporar la diversidad. De esta forma, implicaría una reflexión crítica sobre aquello que se identifica como las formas culturales propias, lo que permitiría entender su carácter relativo e histórico y, por lo tanto, la arbitrariedad que subyace a su imposición como las únicas formas culturales posibles.

Así, la respuesta para abordar los procesos de aprendizaje desde una mirada intercultural se relaciona con la incorporación de políticas que aborden la desigualdad no solo en la educación, sino que también en otros sectores, pues la educación no puede generar por sí sola integración si los niños y niñas continúan enfrentándose fuera de ella a contextos y condiciones altamente asimétricas y desiguales. Junto con eso, es necesario que el proyecto educativo intercultural promueva la valoración de las prácticas y costumbres de otros grupos o comunidades, apreciando las diferencias étnicas, sexuales y de género, entre otras.

En el trabajo de campo, las investigadoras han encontrado que el racismo cotidiano y la invisibilización de la discriminación siguen siendo serias dificultades que impiden la incorporación completamente exitosa de un proyecto intercultural. Así, si bien los apoderados de niños y niñas migrantes señalan que sus hijos e hijas sufren discriminación, los profesores y apoderados invisibilizan situaciones específicas a las que se enfrentan estas personas como son las extensas jornadas laborales (que impiden a las madres y a los padres adoptar un mayor compromiso escolar), y el hacinamiento, factor que incide crucialmente en la vida de los niños y niñas. También se perciben prejuicios de género, adjudicándose únicamente a las niñas migrantes actitudes que se describen como “excesivamente sexualizadas”.

Las autoras señalan que si bien existe un discurso moralizador que califica de forma negativa la discriminación, esto no cambia las conductas y prejuicios ya adoptados y no toca los puntos más profundos que dan lugar a dicha discriminación. Así, el desafío principal al que se enfrenta la educación chilena tiene que ver con “descentrar el lugar de privilegio que ocupa la sociedad dominante y hegemónica, a modo de construir un espacio democrático donde actores provenientes de múltiples contextos estén en igualdad de condiciones”.

Para esto los propios docentes, directivos  y profesionales del colegio son capaces de identificar las herramientas que podrían ayudarlos, entre ellas se encuentra la adecuación curricular para adaptarse a la necesidad de los niños y niñas extranjeros, conocimiento del currículo de origen para conocer en mayor profundidad los procesos de aprendizaje de estos niños y niñas, regularización de los alumnos migrantes, apoyo institucionalizado para la barrera idiomática, incorporación de todos los actores de la comunidad educativa en la implementación del modelo intercultural y, finalmente, contar con una herramienta idónea que permita liderar adecuadamente un proceso de enseñanza y aprendizaje basado en la educación multicultural.

Para leer texto completo de la investigación:

http://www.revistaei.uchile.cl/index.php/REI/article/viewFile/44534/46582