El estudio “Mortalidad infantil como indicador de desigualdad del sistema de salud chileno” demuestra que existe una profunda desigualdad entre comunas del país en materia de mortalidad infantil.El artículo publicado en la Revista Estudios de Políticas Públicas también permitió concluir que esta brecha entre comunas se acrecentó entre el 2001 y el 2011.
Según el trabajo realizado por la investigadora Andrea Morales en el artículo “Mortalidad infantil como indicador de desigualdad del sistema de salud chileno”, existe una profunda desigualdad respecto a la tasa de mortalidad infantil al interior del país. Entre los factores que perpetuarían esta situación, que se agravó entre el año 2001 y el 2011, se encuentran el nivel socioeconómico comunal, la inversión municipal en salud, y temáticas planteadas en los años 40 del siglo pasado, como el alcantarillado y el agua potable.
“En Chile tienes comunas cuyo promedio de mortalidad infantil es como un país anglosajón, desarrollado, y otras comunas donde se comporta como el promedio de los países africanos”. Con estas palabras la investigadora Andrea Morales explica en su artículo “Mortalidad infantil como indicador de desigualdad del sistema de salud chileno” la brecha existente en la tasa de mortalidad infantil entre las distintas comunas del país, y su relación con la realidad socioeconómica de las mismas.
La autora aseguró que el análisis que realizó en el curso de su tesis de magíster le permitió concluir que existe una estrecha asociación entre pobreza, nivel de escolaridad comunal, inversión municipal en salud primaria –y la disponibilidad de recursos para esa inversión- y una mayor mortalidad infantil. Sin embargo, la elaboración de políticas públicas en base a promedios nacionales impide ver la profunda desigualdad que existe al interior del país.
“Este estudio revela que hay una desigualdad y un nivel de segregación tremendo en Chile que está empeorando, y que a pesar de lo que se piensa, factores como el alcantarillado y el agua potable aún tienen impacto en muchas comunas. Temas que se plantearon en los años 40 del siglo pasado siguen estando vigentes en el 2016”, explicó la investigadora, quien aseguró que entre 2001 y 2011 la brecha de mortalidad infantil se acrecentó.
Los resultados del estudio reflejan, en opinión de Morales, la profunda desigualdad del país en cuanto a la oportunidad de sobrevivir durante el primer año de vida, lo que conlleva un llamado de atención sobre la necesidad de evaluar la distribución de los recursos públicos en salud, revisando además el enfoque de las políticas públicas para disminuir la mortalidad infantil.
Así, Andrea Morales asegura que es necesario sacarse la venda de los ojos respecto a los resultados de Chile en materia de salud, ya que “mientras se siga utilizando los promedios nacionales como base para la generación de políticas públicas, se seguirá perpetuando la desigualdad”.
Fuente: Radio Universidad de Chile